Hacia una integración de saberes desde una perspectiva decolonial

La regulación de las medicinas en 1910, a través del informe Flexner en América, y en 1958 con la hibridación de la medicina china con la medicina occidental, dando como resultado la Medicina Tradicional China, en Oriente, trajo como consecuencia que el modelo biomédico actual se posicione jerárquicamente por sobre otros modos de curar, tratar y prevenir, a tal punto que algunas tradiciones tanto americanas como orientales fueron excluidas o condenadas a la marginalidad por no cumplir con lo que se dictaminó como "lo correcto". Desde el punto de vista de la revisión histórica propuesta por la crítica decolonial a la razón científica occidental llevada a cabo por ejemplo por Boaventura De Sousa Santos, y tomando como ejemplo el Informe Flexner, podemos ver de qué modo la medicina avalada por Flexner es el resultado de una racionalidad que, articulada con el capitalismo, concibe al cuerpo como máquina productora y no como unidad. La osteopatía como uno de esos saberes marginados, parte del principio según el cual el cuerpo es una unidad. Una unidad biopsicosocial. Desde una ecología de saberes proponemos deconstruir el imaginario binario de oposición entre ciencia moderna y ciencias tradicionales complementarias, en este caso concreto la oposición entre medicina convencional y Osteopatía, para construir una tercera vía donde se puedan complementar, y así dar lugar a diferentes modos de conocimiento, los cuales tendrán diferentes consecuencias para el mundo y lo afectarán de distinto modo. Como bien lo dice De Soussa Santos, formar subjetividades holísticas influye en la construcción de realidad, ya que el conocimiento que construimos interviene en ella, conocimiento no como representación de una idea, sino como intervención en la realidad.