El SIFO son las siglas en inglés de sobrecrecimiento fúngico en el intestino delgado (Small Intestinal Fungal Overgrowth), un trastorno infradiagnosticado que puede provocar distensión y dolor abdominal, gases, trastornos en la defecación, fatiga, excesiva apetencia por dulces, dolores articulares, irritabilidad o insomnio. Candida es un grupo (género) de hongos que vive en nuestros intestinos y no es necesariamente patógena. El problema aparece cuando cambia el tipo de crecimiento (de unicelular a hifas): en este caso, puede infectar la mucosa digestiva y provocar una serie de alteraciones digestivas e inmunológicas. El primer paso para poder tratar la Candida patógena en el tubo digestivo de forma exitosa, es localizar la causa que lo ha provocado. Además, debemos establecer un tratamiento que ayude a controlar el crecimiento de este hongo, mejorar la ecología microbiana, recuperar la mucosa intestinal y, por último, favorecer la detoxificación hepática.